Gremio farmacéutico se la juega con la autoregulación
Con el propósito de buscar una mayor transparencia en la realización de contratos entre el Gobierno y las empresas del gremio farmacéutico, Afidro y la Vicepresidencia de la República, firmaron un acuerdo donde ambas partes se comprometen a garantizar el buen cumplimiento de todos sus acuerdos comerciales, ya que el Estado es un comprador institucional de medicamentos para estas empresas.
De está manera, el gremio busca respaldar, de una manera integra, el empeño actual del Gobierno de luchar de manera frontal contra la corrupción en todas sus formas. Lo hace a través de está iniciativa que es pionera y ejemplo positivo para todo el sector industrial colombiano. Desde 2006, el Gobierno ha venido invitando a los diferentes gremios a participar en una estrategia conjunta que está encaminada a lograr una mayor transparencia para luchar de manera efectiva contra la corrupción. En el caso de la industria farmacéutica, en el tema de comercialización, tiene códigos de ética establecidos con anterioridad y las reglas que aplica son estrictas en lo que al tema de investigaciones y nuevas tecnologías de medicamentos se refiere.
La creación del pliego que se realizó en conjunto con las empresas afiliadas y el Gobierno. De está manera se pretende exponer y hacer participe a los consumidores de los compromisos que cada una de las partes involucradas adquirió.
En el caso de las compañías, las responsabilidades parten desde la capacitación de los empleados y la publicación en sus páginas Web del acuerdo. Por parte del Estado, los compromisos van desde una veeduría que regula la ejecución de los convenios, hasta la revisión anual del tratado firmado y el cumplimiento del mismo.
Frente a este tema, Francisco de Paula Gómez, presidente de Afidro, dijo que “El propósito principal de este acuerdo es mejorar la confianza y el fortalecimiento de los procesos de construcción de reglas claras y practicas de las compañías farmacéuticas del país. Donde los afiliados a la asociación con la firma de este acuerdo, se comprometen a no permitir pagos de ninguna índole para favorecer decisiones en lo que a adjudicación de contratos se refiere”.
Así mismo, las empresas del gremio están completamente de acuerdo con la realización de este documento. Así lo reitera Edgar A Rojas, gerente de la división farmacéutica de Merck S.A. “El Acuerdo por la autorregulación es una iniciativa muy importante, ya que traerá múltiples beneficios para la industria.
Esto, se convierte en la confirmación de un compromiso con la sociedad en nuestro rol de actores socialmente responsables y garantiza la transparencia de laboratorios nacionales y multinacionales en todas sus relaciones comerciales con el Estado, siendo este el comprador institucional de medicamentos en el país”, concluye Rojas.
Por su parte, Juan Carlos Berbessi, director medico y de asuntos regulatorios de GlaxoSmithKline, afirma que "el acuerdo asegura que las actividades de mercadeo, promoción y comercialización se encuentran claramente encaminadas a la efectiva y transparente difusión de las actividades de investigación y desarrollo de productos farmacéuticos. Además, de llevar la información del perfil de eficacia y seguridad a los profesionales de salud. Adicionalmente es la forma idónea de apoyar las actividades de información y educación médica y de obtener la apropiada retroalimentación sobre el uso de nuestras medicinas”. Declaró Berbessi.
Así mismo, El vicepresidente, Francisco Santos, ha invitado a la industria farmacéutica nacional para unirse a esta iniciativa, resaltando el acuerdo con Afidro como un ejemplo no sólo para el sector sino también para las demás industrias del país.
Legislación del gremio
Desde hace varios años, el gremio rige sus prácticas comerciales en el país por un estricto código de ética propio y que, por tratarse de compañías internacionales, cada una se regula por normas internacionales como el de IFPMA (International Federation of Pharmaceutical Manufacturers), EFPIA (European Federation of Pharmaceutical Industries Associations) y PhRMA (Pharmaceutical Research and Manufacturers of America). En este contexto, el actual Acuerdo de Autorregulación es una continuación de este esfuerzo sostenido de transparencia en su actividad comercial, por parte de la industria farmacéutica innovadora, extendido a sus relaciones con el Estado.
De está manera, el gremio busca respaldar, de una manera integra, el empeño actual del Gobierno de luchar de manera frontal contra la corrupción en todas sus formas. Lo hace a través de está iniciativa que es pionera y ejemplo positivo para todo el sector industrial colombiano. Desde 2006, el Gobierno ha venido invitando a los diferentes gremios a participar en una estrategia conjunta que está encaminada a lograr una mayor transparencia para luchar de manera efectiva contra la corrupción. En el caso de la industria farmacéutica, en el tema de comercialización, tiene códigos de ética establecidos con anterioridad y las reglas que aplica son estrictas en lo que al tema de investigaciones y nuevas tecnologías de medicamentos se refiere.
La creación del pliego que se realizó en conjunto con las empresas afiliadas y el Gobierno. De está manera se pretende exponer y hacer participe a los consumidores de los compromisos que cada una de las partes involucradas adquirió.
En el caso de las compañías, las responsabilidades parten desde la capacitación de los empleados y la publicación en sus páginas Web del acuerdo. Por parte del Estado, los compromisos van desde una veeduría que regula la ejecución de los convenios, hasta la revisión anual del tratado firmado y el cumplimiento del mismo.
Frente a este tema, Francisco de Paula Gómez, presidente de Afidro, dijo que “El propósito principal de este acuerdo es mejorar la confianza y el fortalecimiento de los procesos de construcción de reglas claras y practicas de las compañías farmacéuticas del país. Donde los afiliados a la asociación con la firma de este acuerdo, se comprometen a no permitir pagos de ninguna índole para favorecer decisiones en lo que a adjudicación de contratos se refiere”.
Así mismo, las empresas del gremio están completamente de acuerdo con la realización de este documento. Así lo reitera Edgar A Rojas, gerente de la división farmacéutica de Merck S.A. “El Acuerdo por la autorregulación es una iniciativa muy importante, ya que traerá múltiples beneficios para la industria.
Esto, se convierte en la confirmación de un compromiso con la sociedad en nuestro rol de actores socialmente responsables y garantiza la transparencia de laboratorios nacionales y multinacionales en todas sus relaciones comerciales con el Estado, siendo este el comprador institucional de medicamentos en el país”, concluye Rojas.
Por su parte, Juan Carlos Berbessi, director medico y de asuntos regulatorios de GlaxoSmithKline, afirma que "el acuerdo asegura que las actividades de mercadeo, promoción y comercialización se encuentran claramente encaminadas a la efectiva y transparente difusión de las actividades de investigación y desarrollo de productos farmacéuticos. Además, de llevar la información del perfil de eficacia y seguridad a los profesionales de salud. Adicionalmente es la forma idónea de apoyar las actividades de información y educación médica y de obtener la apropiada retroalimentación sobre el uso de nuestras medicinas”. Declaró Berbessi.
Así mismo, El vicepresidente, Francisco Santos, ha invitado a la industria farmacéutica nacional para unirse a esta iniciativa, resaltando el acuerdo con Afidro como un ejemplo no sólo para el sector sino también para las demás industrias del país.
Legislación del gremio
Desde hace varios años, el gremio rige sus prácticas comerciales en el país por un estricto código de ética propio y que, por tratarse de compañías internacionales, cada una se regula por normas internacionales como el de IFPMA (International Federation of Pharmaceutical Manufacturers), EFPIA (European Federation of Pharmaceutical Industries Associations) y PhRMA (Pharmaceutical Research and Manufacturers of America). En este contexto, el actual Acuerdo de Autorregulación es una continuación de este esfuerzo sostenido de transparencia en su actividad comercial, por parte de la industria farmacéutica innovadora, extendido a sus relaciones con el Estado.